Los Mochis, Sinaloa.- El presidente de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur Ing. César Enrique Galaviz Lugo señaló que, tras concluir el ciclo agrícola otoño-invierno 2023-24 en el norte de Sinaloa donde predominó la escasez de agua, para muchos agricultores esta temporada fue de grandes retos donde tuvieron que redoblar esfuerzos para poder establecer un programa de siembra diferente.
“Fue una temporada muy difícil donde los agricultores en base a la poca disponibilidad de agua en nuestro sistema de presas, tuvimos que buscar diferentes alternativas de siembra ya que en el maíz no se pudo registrar la superficie promedio por ser un cultivo de alta demanda de agua”, señaló el Ing. César Galaviz.
Uno de los mayores impactos de la sequía en esta temporada fue la gran reducción de superficie sembrada de maíz, donde a nivel estatal se registraron 293,642 hectáreas, con una reducción de 44% comparado con el año pasado, mientras que en la zona norte se establecieron 29,797 hectáreas, con una significativa reducción del 72% comparado con el ciclo anterior, causando con ello un desequilibrio en la producción promedio de maíz, así como también en el establecimiento de otros cultivos.
“La fuerte reducción de superficie de maíz conjugado con el aumento de cultivos de baja demanda de agua como frijol, garbanzo, sorgo y cártamo, aunado con bajos rendimientos por la misma escasez de agua, provocaron escenarios que lamentablemente se traduce en un impacto social y económico muy fuerte en el sector agrícola y en todo el estado, donde la agricultura juega un papel muy importante en Sinaloa”, indicó Galaviz Lugo.
De acuerdo a los registros de aportaciones de agua en el sistema de presas del norte de Sinaloa elaborado por la Red Mayor del Valle del Fuerte, el ciclo de lluvias que comprende de octubre 2022 a septiembre de 2023, captaron solamente 933 mm3, convirtiéndose en el registro más bajo de la información histórica de este organismo, siendo uno de los principales factores de la problemática de agua que padecieron durante toda la temporada los agricultores.
“Actualmente los agricultores del norte de Sinaloa estamos unidos en oración para que en este verano tengamos un buen temporal de lluvias, donde el pasado mes de junio se registraron 484 mm3, siendo los meses de agosto y septiembre los más importantes donde la media histórica es de 1,158 y 864 mm3 respectivamente, esperando sean unos meses extraordinarios para que las tres presas regionales logren buenos niveles”, mencionó el Ing. Galaviz.
Ante estos niveles de sequía tan prolongados, hoy más que nunca la actividad agrícola está en riesgo, ya que depende directamente de este recurso natural para la producción de alimentos, donde los organismos hidroagrícolas federales y estatales deben de implementar estrategias de manera urgente para modernizar la red de distribución de agua para su mayor conservación, conducción y utilización eficiente.
“Como organismo agrícola seguiremos promoviendo y concientizando a los agricultores para que cuidemos el agua, que hagamos todo lo necesario para ser más eficientes y estratégicos al momento de regar nuestros cultivos; asimismo, estar en constante comunicación con las Redes Mayores de los valles del Fuerte y El Carrizo junto con los módulos de riego que las conforman para trabajar de la mano en el cuidado del agua”, confirmó Galaviz Lugo.
Por último, es importante señalar la importancia de una gestión sostenible del agua a través del Gobierno Federal, donde se incentive la modernización de la infraestructura hidroagrícola y la implementación de sistemas de medición de agua desde las presas hasta los puntos de control y de esta forma, mitigar el impacto de la escasez hídrica en la agricultura del estado de Sinaloa.