DE LECTURA CONGRESO DEL ESTADO A DICTAMEN QUE PERMITIRÁ DONACIÓN DE TERRENO DE LAS PRESA SANTA MARÍA Y PICACHOS A LA FEDERACIÓN
En la víspera de la visita del Presidente Andres Manuel López Obrador a Sinaloa, que inicia este viernes con la inauguración del acueducto de Concordia, el Pleno del Congreso del Estado de Sinaloa dio primera lectura este jueves a dictamenes que autorizan al titular del Poder Ejecutivo para que a nombre y representación del estado enajene a título de donación gratuita a favor del Gobierno Federal, los terrenos en donde fue construida la presa Santa María, en el municipio de El Rosario y los terrenos donde fue construida la presa Picachos, ambas en el sur de la entidad.
El dictamen autoriza al gobernador Rubén Rocha Moya para que a nombre y representación del estado de Sinaloa, enajene a título de donación gratuita a favor del Gobierno Federal, por conducto del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales, con destino a la Comisión Nacional del Agua, una superficie de terreno de 2 mil 438 hectareas, 98 áreas y 71 centiáreas, expropiada a la comunidad de “Santa María y Anexos”, ubicada en el municipio de El Rosario, estado de Sinaloa, destinada para la construcción de la presa Santa María, y una superficie de terreno de mil 869 hectáreas, 35 áreas y 29 centiáreas, en superficie expropiada a la comunidad de “San Marcos”, ubicada en los municipios de Mazatlán y Concordia, destinada para la construcción de la presa Picachos.
El dictamen leído resalta que la nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privada las modalidades que dicte el interés público, así como el de regular, en beneficio social, el aprovechamiento de los elementos naturales susceptibles de apropiación, con objeto de hacer una distribución equitativa de la riqueza pública, cuidar de su conservación, lograr el desarrollo equilibrado del país y el mejoramiento de las condiciones de vida de la población rural y urbana, y donde todas las autoridades tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos, destacando que toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible y que el Estado garantizará dicho derecho.
El derecho al agua –puntualiza– es un derecho inherente a la dignidad del ser humano y elemental para contar con el disfrute de otros derechos fundamentales, y permite el acceso a un nivel de vida adecuado, el desarrollo de la persona, así como la participación en actividades laborales, educativas, sociales y culturales