“Qué lindo auditorio”, afirmó emocionado Eduardo García Barrios, maestro titular de la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, en el magno concierto de reinauguración del Auditorio Héroes de Sinaloa, que abrió con el mundialmente conocido vals Sobre las Olas, del mexicano Juventino Rosas, que 40 años después de su creación seguía siendo disputado como un vals europeo.
Y así, como en una gran fiesta, con entrada libre y en el marco del Festival Cultural Sinaloa, la OSSLA, deleitó a los más de mil asistentes, que no solo disfrutaron de un extraordinario espectáculo, sino que también evocaron gratos recuerdos, de los espectáculos, las ceremonias y los grandes eventos que por muchos años se realizaron en este recinto cultural.
Este miércoles 23 de octubre, el Héroes de Sinaloa, el corazón de la cultura de Guasave, volvió a latir fuerte, renovado, con duela nueva, butacas modernas, un equipo de sonido de última generación, iluminación, alfombras, pisos, pintura, refrigeración y muros rehabilitados, en una alianza histórica, sin precedentes, en donde se unieron los esfuerzos del gobierno municipal, del gobierno del estado, de empresarios y ciudadanos que se sumaron a esta causa.
“Hoy vamos a tener de vuelta el auditorio Héroes de Sinaloa, como el mejor de todo el noroeste del país”, expresó el presidente municipal, Martín Ahumada Quintero, después del corte de listón del auditorio, en donde manifestó el cariño, el aprecio y el agradecimiento para todas aquellas personas que hicieron posible que se concretara esta gran obra, porque “Guasave tiene mucho capital y es tiempo de invertirlo en proyectos como este”.
Agradeció la colaboración también de su esposa, Lourdes Cardona Leal y del equipo de DIF Guasave que se unieron a este proyecto, del mismo modo como ayudaron en la rehabilitación del auditorio del Centro Cultural Guasave.
“Quisiera decirle a la Dra. Cecilia (Ramírez, alcaldesa electa) que aquí vamos a dejar un gran ejemplo de lo que juntos sociedad y gobierno podemos llevar a cabo, esto es algo muy relevante y es el antídoto para muchas enfermedades de nuestra sociedad, espero que, entre todos, hacer un equipo, un patronato que pueda evolucionar con el tiempo y traiga los mejores tiempos de Guasave, los de los artistas, los de los deportistas, porque Guasave es tierra de campeones”, recalcó el alcalde.
Ahí, entre aplausos y emociones, estaban algunos de los empresarios que aportaron recursos para el aire acondicionado de 140 toneladas y que ayudaron también en la compra de mil 100 butacas, entre estos, José Gil López Favela, Jesús Enrique Castro, Florencio Angulo y Socorro Castro.
José Gil López Favela, quien encabezó este grupo de ciudadanos, dijo que Guasave siempre ha sido muy colaborativo, porque este sueño se concluye gracias a la confianza que existe entre los empresarios y las autoridades municipales y estatales.
“Guasave es para disfrutarlo, es para vivirlo, espero que disfruten estas instalaciones que les van a gustar, quedaron de primera clase con el apoyo de todos nuestros amigos, nuestro doctor Ahumada, muchas gracias, yo sé que la doctora Cardona nos ayudó mucho y a nuestra doctora Ceci, usted sigue, seguimos”.
Al otro lado del escenario, se rehabilitó también, la Galería de los Guasavenses Ilustres, que de nuevo tendrá su lugar muy especial en este auditorio, que fue construido en el trienio de José Luis Leyson Castro y que se inauguró en 1986 con un concierto de Lola Beltrán.
Bajo la batuta del maestro Eduardo García Barrios, la OSSLA interpretó de manera magistral melodías regionales como Brisas de Mocorito, de Alberto Alvarado; Danza Ritual del Fuego, de Manuel de Falla; Summum Cumbia, de Samuel Murillo; El Venado, de Eduardo Parra; El Danzón No. 2 de Arturo Márquez; El Huapango, de Pablo Moncayo y cerraron con música internacional con la Danza Oriental, de Tatiana Shkérvina.
“Es el inicio de muchos eventos que vendrán más adelante”, señaló el empresario José Gil López Favela, quien, con un apretón de manos, agradeció la colaboración de los guasavenses, del gobierno del estado y del presidente municipal para concretar este enorme proyecto, que se miraba imposible concluir en 100 días, para cerrar con broche de oro la administración.